En este año, el padre MARTÍN DEL RÍO, escribió quizá el libro más completo sobre BRUJERÍA Y MALEFICIOS, “Disquisiciones mágicas”.

Esta obra es tan completa y tan conocida como el MALLEUS MALEFICARUM (Martillo de las brujas) de Sprenger y Kramer, publicada en 1486.

Ambas obras rebosan de casuística, es decir que están basadas en conocimientos, experiencias y razones que los sostienen. Sin embargo hemos de ponernos en la mentalidad de la Edad Media y la forma en que se concebía todo lo que no fuera judeocristianismo.

Este libro nos muestra cómo era la forma de pensamiento religioso predominante en esos siglos de herejías y supersticiones a granel.

El padre Martín del Río (1551-1608), catedrático de Teología en Salamanca, escribe, entre otras cosas, en su obra DISQUISICIONES MAGICARUM, que las BRUJAS son una infeliz especie, engañadas por los demonios que les obligan a renegar de Jesucristo y, una vez hecha la renuncia de la fe, las marce como sus esclavas y les asigna un MARTINILLO o MARIDILLO, que es un ser que las sigue y lleva a los aquelarres, n donde las espera su príncipe, el diablo.

El libro le parece a Menendez y Pelayo “el más erudito y metódico y el mejor de cuantos hay sobre la materia”: en cambio, nosotros estamos de acuerdo con otros críticos que opinan que Martín del Río es un individuo de notables tragaderas que “nos habla de monstruos, demonios súcubos y demonios íncubos, de cabrones con alas, de brujas a lomos de escobas y de aquelarres por él mismo presenciados.

Consideramos la obra como una curiosa rareza que, aparte de suministrar datos muy valiosos, contiene notorias incongruencias, las cuales no la deben hacer desmerecer por su valioso estudio de las supersticiones del siglo XVI.


Del libro DUENDES de Carlos Canales y Jesús Callejo.